La tercera muestra
Paisaje, pasión y sagrado del Colectivo Artemusa que aún puede admirarse en el
Parque Negra Hipólita comienza por el final dentro del recorrido natural que
siempre toman las personas. La resurrección es la primera estación con que se
encuentran generalmente los visitantes. De esta manera se entiende con mayor
alegría este hecho de trascendencia espiritual para los católicos y su fe.
En la presente
columna colocamos el resto de las estaciones para complementar el artículo de
la semana pasada y en propia voz y expresión de los artistas se conozcan sus
conceptos.
X.- JESUS ES
CRUCIFICADO, Gustavo Zajac. “El Grito”
Utilizando una
fotografía y tratando de unir la concepción de la Iglesia de representar el
dolor que significó para Jesús el acto de la crucifixión que he tomado la
imagen gráfica de lo que es para mí la representación del “dolor” y al mismo
tiempo tomar una fotografía que es el elemento plástico por excelencia para la
transmisión de un acontecimiento en nuestros días.
XI.- JESUS PROMETE
SU REINO AL BUEN LADRÓN, María Esther Barbieri. “Los buenos siempre ganan”
A través de
imágenes digitalizadas es una colina con
tres cruces donde la cruz central se apoya, soporta o se une a la cruz de su
derecha mientras se aleja de la izquierda sobre una alfombra que remite al tejido de nuestros indígenas
que suelen representar rayos, nubes, soles, estrellas, cruces, cielos, ríos,
lagos, montañas, plantas, animales, personas, ideas conectadas con la vida o
con la muerte, particularmente relacionados con los héroes culturales y
personajes de los relatos míticos.
XII.- JESUS EN
CRUZ, LA MADRE Y EL DISCÍPULO, Maritza Góngora. “Juan somos todos”
En mi
interpretación, el discípulo, Juan es un marco donde podemos poner nuestros
Rostros. He utilizado Rostros de mi Vida, Rostros conocidos y desconocidos. La
imagen no tiene límite, es continua ya que no hay límite de rostros, ni de
colores: SOMOS TODOS, TODOS ESTAMOS ALLI…... TODOS SOMOS JUAN.
XIII.- JESUS MUERE
EN LA CRUZ, Luisa Dunia. “Pietá”
Tomo dos elementos
ya preexistentes: la Piedad de
Miguelángel, obra escultórica de mármol,
icono emblemático del renacimiento, que combino con uno de mis trabajos en
vidrio, realizo así una postproducción, al componer un elemento renacentista,
con un elemento artístico actual y los uno para dar forma a mi personal
interpretación de una de las estaciones
de la Vía Sacra, realizando así a una tercera imagen actual, creada con dos
elementos que tuvieron origen en tiempos distintos, para situaciones disimiles
y bajo condiciones distintas.
XIV.- JESUS ES
SEPULTADO. Manuela Moreira. “Sepulcro”
“Ni la piedra del
sepulcro pudo opacar su luz” Toda cosa o ser existente viene a cumplir su
misión que es el deseo de Dios, que brillará donde tenga que brillar, como
Jesús lo hizo…..así es y será por siempre.
XV.- JESUS RESUCITA. Eddy Chacón. “Al Tercer
día”. (Artista invitada)
La imagen digital intervenida
es una representación de la vida en el hombre. Un corazón es, tanto que órgano vital, la fracción
que alberga el principio de la vida, el vigor y la fuerza. Esta pieza ofrece una metáfora que representa
la fuerza creadora, la fuerza divina que es capaz de accionar de nuevo a Jesús
y llevarlo a la vida definitiva, esperanza por demás de todos los cristianos.
Las obras
realizadas en las distintas especialidades artísticas, fueron posteriormente
digitalizadas para poder presentarse a cielo abierto y como bien lo refleja su
titulo, Paisaje, pasión y sagrado, amparó
la temática de los tres elementos como propuesta estética. La obra
interpretada con entusiasmo por el artista,
hizo de lo sagrado parte del paisaje, un reposo que se presenta al
caminante en el parque, y le propone en el tiempo un encuentro místico y
moderno, a la vez.
El
Viacrucis es una devoción centrada en los Misterios Dolorosos de Cristo, que se
meditan y descubren caminando y deteniéndose en cada una de las estaciones que
representan los episodios más trascendentales de la pasión.
Es
el tercer año consecutivo y se puede
decir que los artistas se superaron a sí mismos. Cada año es
un reto que enfrentan con la mayor decisión y el mejor de los ánimos.
No pasaron
desapercibidas las visiones de los artistas porque a lo largo de esta muestra
se observaron personas detenidas frente a los pendones, observando e
interpretando las obras allí presentadas. Una suerte de comunicación necesaria
entre el arte y el mundo.
Si bien el artista
hizo la obra esta se independiza de él y mientras es observada; se comunica y
revive en la energía del otro (NOTITARDE, 29/04/2012, LECTURA TANGENTE).-